CHIA:
Los indígenas que caminaban desde el Río Colorado hasta las
costas de California para intercambiar turquesas por conchas marinas sólo
llevaban chia para su nutrición.
Si Usted trata de mezclar una cuchara llena de Chia dentro
de un vaso de agua y lo deja durante aprox. 30 minutos o más, cuando Usted
regrese el vaso parecerá que no contiene semillas o agua, sino una gelatina
casi sólida.
Esta reacción que genera el gel se debe a la fibra soluble
presente en el Chia. El gel que se forma en el estómago crea una barrera física
entre los carbohidratos y las enzimas digestivas que los disuelven, de manera
tal que disminuye la conversión de carbohidratos en azúcar.
En adición a los obvios beneficios para los diabéticos, esta
demora en la conversión de los carbohidratos en azúcar genera la habilidad de
crear resistencias.
Los carbohidratos son la gasolina de la energía en nuestros
cuerpos.
El prolongamiento de su conversión a azúcar estabiliza los
cambios metabólicos, disminuye los cambios de altos y bajos, creando así una
mayor duración en sus efectos de generación de energía.
Una de las cualidades excepcionales de la semilla de Chia
son sus propiedades hidrofílicas, teniendo la habilidad de abosrober más de 12
veces su peso en agua. Dicha habilidad de mantenerse en el agua ofrece la
posibilidad de prolongar la hidratación.
Los fluídos y electrolitos proveen el entorno que dá vida a
las células del cuerpo humano. Su concentración composición son reguladas para
permanecer lo mas constante posible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario